lunes, 27 de febrero de 2017

Perdón


intentando musas aleatorias en el confín del baldío
ni las suaves ardillas de tu pelo arrojarán amnesia,
cementerio de un nombre, allá...
donde los huérfanos sufren el carruaje de la espera.

¿cuándo prescribe la arrogancia de los besos?
mientras tanto me columpio en cicatrices.
perdónanos Señor por el escaso arte
que supimos concebir con nuestros cuerpos.
VMC

1 comentario:

  1. Llegué hasta acá encantada por un librito que encontré en la clínica que me hospeda. Espero que escribas seguido. Me pondré al día con los blogs. Gracias.

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